jueves, 28 de junio de 2007

Enredados con las TI

Por Juan Pablo Dalmasso y Felipe Aldunate; AmericaEconomía, Ibiz

El negocio que tenían los campesinos de la ciudad colombiana de Suárez no era muy dulce. Aunque producían una azúcar no refinada llamada panela (conocida en otros países como chancaca) muy demandada por los consumidores del país, su pequeño mercado local no les daba para venderla a buenos precios. Aventurarse a los mercados de ciudades vecinas nunca resultó buen negocio. A pesar de que eran más grandes, las alzas y bajas de precios para la panela también lo eran y muchas veces el viaje de 45 kilómetros era en vano.

La historia comenzó a cambiar a mediados de 2004, cuando llegaron las primeras computadoras conectadas a internet en el poblado. Aunque inicialmente fueron los escolares los que monopolizaron las ocho máquinas, algunos campesinos fueron capacitados para usarlas. Se trataba de conexiones de sólo 56 kbps, suficientes para trabajar con un servicio de información que les daba detalles de a cuánto estaba cotizando la panela en ciudades como Manizales, Cali, Armenia, Pereira y Buenaventura. Con la certeza de los precios en el punto de partida, a los paneleros se les abrieron nuevos mercados, los que pasaron rápidamente a ser tan accesibles como su pueblo local. La información en línea les permitió aumentar su producción y fortalecer su cadena de distribución. Con ello, hoy los campesinos de Suárez no sólo han potenciado a Suárez como centro de producción de la panela, sino que han transformado sus calles en sede de un emergente centro de comercialización y distribución de productos agrícolas.

El final feliz de esta historia rural transformada por la tecnología, deja una moraleja que desde hace algunos años varios han vivido en América Latina: la tecnología bien usada puede cambiar totalmente un negocio, por muy tradicional que sea. Es el caso de la Compañía Argentina de Granos (CAGSA), un trader del negocio agroganadero pampeano, que compró 4.000 blackberries, teléfonos con posibilidad de leer e-mails y trasmitir datos, para distribuir entre sus principales proveedores de granos. Gracias a una aplicación informática ad-hoc, la compañía puede mantenerse comunicada con sus productores y transaccionando a tiempo completo. “Las expectativas son enormes”, dice Alejandro Ramírez, vocero de CAGSA. “Aunque los primeros resultados del operativo podrán verse recién en marzo próximo, conseguiremos elevados ahorros”.

No obstante, se trata de excepciones antes que de una regla. En América Latina, aunque la inversión en tecnologías de la información (TI) va a tener su cuarto año de crecimiento consecutivo, hasta alcanzar un total de US$ 42.000 millones, la cifra apenas llega a 1,5% del PIB regional. “Es una proporción menor a la de otras economías emergentes del mundo, como Asia Pacífico, que invierte un 2,5%”, dice Ricardo Villate, director de soluciones empresariales de IDC, en Miami. Lo peor es que 2/3 de lo que se invierte en la región es realizado por las grandes empresas, dejando sólo un tercio de la inversión para las pyme, el grupo de empresas que emplea a más del 80% de los trabajadores de la región. Esto implica que cuatro de cada cinco trabajadores latinoamericanos pueden quedarse fuera del salto en productividad asociado a la inversión en TI.

“Las grandes empresas, las multilatinas, no están muy distantes del mercado global”, dice José Duarte, presidente de SAP Latinoamérica. “Ellas hicieron sus grandes inversiones en ERP durante los 90 con un atraso internacional de cinco a 10 años, y hoy están en temas como administradores de la cadena de valor río arriba o río abajo”. Pero otra cosa es con las pyme, dice el ejecutivo. “Muchas están ávidas por adquirir sus sistemas de gestión y es el segmento donde percibimos el mayor ritmo de crecimiento: de los 700 clientes que hizo SAP durante el año pasado, 650 fueron del segmento pyme”.

No todos comparten la misma visión. “La oposición no está entre las grandes empresas y las pequeñas, sino que entre tradicionales y modernos”, dice Sergio Carrera, director general de comercio interior y economia digital de la SecretarÍa de Economía de México. “Hay pequeñas empresas que están muy avanzadas en la digitalización de sus procesos y hay empresas grandes que han quedado rezagadas de su industria porque no supieron cómo adaptarse”. Sin embargo, Carrera coincide con que las industrias más atrasadas en sumarse a la economía digital son aquellos sectores más tradicionales, conformados por pymes, como las tiendas de barrio, la construcción y las zapaterías. Una realidad que se extiende al resto de la región.

Entre los sectores que más han avanzado por toda la región están los bancos que han transformado su canal virtual en un servicio básico en la atención de sus clientes. También están los supermercados, principalmente las grandes cadenas, que han desarrollado mecanismos electrónicos de relación con sus proveedores, aunque en la parte de comercio con sus clientes finales aún hay sólo avances marginales. Además está los servicios de turismo que desde México a Tierra del Fuego han visto surgir una serie de plataformas para atender vía internet a todo tipo de turistas que van a cualquier destino. En este sector destacan claramente las líneas aéreas, que sin el desarrollo de procesos altamente digitalizados serían incapaces de ver florecer un fenómeno como el de las aerolíneas de bajo costo.

En algunos países hay casos más exclusivos. “En Chile, las que más han avanzado son las mineras, que constantemente están incorporando TI para poder seguir compitiendo con las grandes ligas”, dice Claudia Bobadilla, gerente general de la Fundación País Digital. En México, “son las autopartistas uno de los mejores ejemplos”, dice Carrera. En Colombia, “las textileras de Medellín forman una red altamente tecnologizada”, dice Sandra Abreu, directora ejecutiva de la Corporación Colombia Digital.

Se trata justamente de empresas que están más expuestas al mercado global. De esto se saca una lección: para globalizarse, primero hay que digitalizarse.

Eso es lo que está realizando el argentino GRUPO RB, propietario de tres empresas: la productora de estampados Ferrosider, de corte de chapas Polimetal y una de llantas Ferrosider Wheels. A partir de 2002 comenzó la implementación de sus empresas de un sistema de gestión ERP de la brasileña Datasul, “debido a su versatilidad para las empresas manufactureras”, dice Carlos Chapp, gerente de sistemas del grupo. Gracias al sistema, ahora los gerentes del grupo pueden seguir en tiempo real los acontecimientos de las tres empresas, amén de reducir el ciclo de vida de un producto. “Antes entre que se tomaba registro de un pedido, se registraba la producción del día en papel para poder pasarlo después al sistema comercial y generar la factura se tardaba dos días. Ahora ingresa el pedido, el operario en la línea de producción registra la tarea en tiempo real, la factura está libre ese mismo día y el camión puede salir a la madrugada siguiente”, explica Chapp.

Pero para tomar decisiones como ésta hay que vencer una serie de barreras culturales. “Las empresas aún no entienden cómo calcular el retorno de la inversión en tecnología”, dice Carrera. “Mientras tengan esa visión, no invertirán más en sus procesos”.

Hay otro tipo de dificultades. En muchos países donde prima la economia informal, como Brasil, Centroamérica y los países andinos, hay una resistencia a ocupar los canales electrónicos para hacer transacciones, pues aunque se llaman ‘canales virtuales’, van dejando registrada cada una de las operaciones que se realizan. Y sus efectos tributarios.

Estos obstáculos, sumados a la menor educación, ingreso per cápita, entornos macroeconómicos más inestables y mayor desigualdad social tienen relegados a todos los países de la región en indicadores simples de economía digital, como las tasas de penetración de internet, ordenadores y servidores. Incluso cuando nos comparamos con países de ingresos iguales. “Chile, que es el que está más avanzado en la región, está por debajo de países como Portugal, Corea o Grecia”, dice Antonio de Lucas Ancillo, gerente de la firma de tecnología Everis y responsable del estudio que su empresa organiza junto al IESE-CELA sobre los avances de la sociedad de la información en América Latina. “La región venía creciendo mucho en los últimos años, pero el crecimiento se ha ralentizado en los últimos trimestres”.

Esta desaceleración no es lo único que preocupa. “El problema no sólo está en el gasto ni en la penetración”, dice Sandra Abreu, de la Corporación Colombia Digital. “El problema es el uso que se les da a los recursos tecnológicos”. Qué tan eficiente es el uso es una variable difícil de medir. Una pista la da IDC. Uno de sus estudios dice que la mayor inversión durante los últimos dos años ha sido sobre el mantenimientos de infraestructura, la actualización de equipos y servidores, junto a la integración de sistemas para superar la vieja práctica de que cada actividad de la empresa tenía su propia aplicación, incluso su propio proveedor.

Pero si eso es o no lo adecuado es difícil de comprobar. Lo que sí está claro es que para el desarrollo de una economía digital más extensa en la región es fundamental el rol de los gobiernos. Por una parte, en las estrategias que desarrollen para fomentar la alfabetización digital y los subsidios para integrar tecnológicamente a las áreas más pobres. Por otra, en la digitalización de sus propios procesos. “El e-government obliga a las empresas que se relacionan con el gobierno a asumir también conductas digitales”, dice Juan Carlos Barahona, del Observatorio de la Economía Digital del Incae, en Centroamérica.

Una responsabilidad importante para el mayor consumidor de todos, cuyo efecto sería multiplicador. Es el caso de Chile, por ejemplo: la posibilidad de hacer declaración de impuestos a través de internet hizo que el tedioso proceso que resultaba llenar papeles y llevarlos al sitio correspondiente que los contribuyentes hacían cada año, ahora sea hecho por más del 99% de ellos vía online. Y es justamente lo que está faltando ahora: que la economía digital chorree a los sectores que están faltos de digitalización. Tal como lo vieron los campesinos de Suárez

1 comentario:

Unknown dijo...

TIC
Esta noticia es una pequeña muestra de lo que las TI o mas conocidas como las TIC vinieron a cambiar las formas de crecimiento en una empresa ya que estas evitan los viajes en vano a los centros de venta del producto y así evita que el producto perezca o sea maltratado dentro del viaje
Este nuevo medio abre las puertas al mundo entero ya sea para estudiantes, empresarios o a todo tipo de personas y con respecto a los negocios abre las ventas no solo del mercado nacional sino también del mercado internacional a un bajo costo es así como vemos en esta noticia de los productores de panela (azúcar no refinada) que con solo con una banda 56kbps pudieron lograr la apertura a 4 principales ciudades de su país. Aquí surgen tantas preguntas como: ¿Por qué no se capacita a los campesinos o ciudadanos en general a utilizar este mercado? O, ¿Qué pudiésemos hacer con bandas de tan alta transmisión de datos como es el INTERNET 2? O simplemente preguntarnos ¿Por que seguimos estudiando en libros si el futuro nos muestra que es mediante la tecnología las futuras aplicaciones y aprendizaje?

Pero esta tecnología no es nueva ya que se ha empezado a trabajar con este tipo de herramientas desde la invención del teléfono, es así como muchos telemercadistas consiguen sus mejores ventas por medio de un teléfono. Tampoco olvidemos que ya en varios países del mundo existe mercados virtuales como es www.mercadolibre.com que con mas de 2000 transacciones diarias en Ecuador, es el líder de este tipo mercado ya que con la facilidad de hacer un clic se puede conseguir desde una casa hasta una mascota o el libro mas difícil de encontrar o simplemente algo de ocio.

Lastimosamente los ecuatorianos somos “noveleros” ya que siempre queremos tener los artículos con la tecnología mas avanzada posible pero nunca la sabemos utilizar. Es así como en el caso de los estudiantes alrededor del 25% que posee una Laptop o computadora portátil pero simplemente se limita a utilizar programas básicos como ya sea Word, Excel, y en el peor de los casos Paint y aun así estas herramientas básicas no son utilizadas al 100% y además dejan de aprovechar que estas nuevas maquinas vienen integradas con tarjetas de red inalámbricas o con conexión bluetooth que permiten al usuario conectarse a la red sin necesidad de estar cerca de una conexión LAN. Pero en este espacio los culpables de inutilizar aparatos de este tipo son las personas que compran celulares, con cámaras Vga de alta resolución, conectividad a Internet, pantalla tipo Palm, etc. y solo los utilicen para recibir llamadas y enviar mensajes ¿Es acaso que nos hemos acostumbrado a adquirir las cosas por una posición social o por simple lujo?

Pero lo decepcionante es que según los datos que nos proporciona la noticia es el 4º año de crecimiento en inversión en tecnologías de inversión y el Ecuador ni siquiera cuenta con un presupuesto para este tipo. Además si en la región solo se el 1/3 de las inversiones las realizan las pymes el gobierno del Ecuador debería dar mas importancia a este medio de ventas ya que es una manera no formal de vender por que ya no se necesita un vendedor parado todo el día en un stand sino simplemente una computadora o un celular que son muy comunes y se los puede llevar a cualquier lugar esto daría la ventaja de estar siempre en la empresa sin necesidad de hacerlo, además esto movería un mercado de correo por que las transacciones finales se daría por medio de empresas como SERVIENTREGA, SERIPAGO y demás, los cuales se verían obligados a contratar empleados generando fuentes de trabajo.

Pero antes de toda esta implementación necesitaríamos los ecuatorianos aprender a manejar las computadoras por lo mínimo a un 50% de su capacidad y esto se debería dar desde las escuelas hasta las universidades que por ejemplo la nuestra solo cuenta con un Internet decadente con computadoras llenas de virus y con tecnología que no va de la mano con los requerimientos que hoy exigen nuestros profesores.


Algo que nos llama la atención es que aquí el SRI también ha implementado un sistema de pago de impuestos como este, en donde el usuario puede hacer su declaración en la pagina www.sri.gov.ec y luego acercarse a ser el pago corresponderte en sus oficinas esto es un ahorro de tiempo para el usuario como para la empresa

Creemos que se debería seguir este tipo de ejemplos para que nuestra economía comience a andar de la mano de la globalización tecnológica que estamos viviendo


Grupo G5