miércoles, 23 de enero de 2008

Inflación en Venezuela podría duplicar el 11% previsto por Gobierno

Fuente: El Comercio, 23-01-2008

Caracas, EFE

Expertos, empresarios y economistas estimaron hoy que la inflación en Venezuela superará este año el 26 por ciento, más del doble de la previsión de once por ciento del Gobierno y cercana al 22,5 por ciento que alcanzó el año pasado.

El cálculo de 26 por ciento fue el resultado de una encuesta realizada a 410 asistentes a la conferencia "Perspectivas económicas 2008", celebrada hoy en Caracas y organizada por la Cámara de Comercio e Industrial Venezolana y Americana (Venamcham).

Los encuestados apuntaron como causas de su previsión al control estatal de cambio establecido en 2003, así como al desabastecimiento de productos básicos, tales como leche, harina de trigo y azúcar.

El ministro venezolano de Finanzas, Rafael Isea, afirmó el pasado día 7 que el Gobierno "mantiene la meta de un once por ciento" de inflación para este año y que aspiraba a lograrla "sin sacrificar de ninguna manera el bienestar de los venezolanos".

El Presupuesto Nacional de 2008, aprobado en noviembre pasado por el Parlamento oficialista, estableció una previsión de crecimiento económico del seis por ciento, una inflación del once por ciento y un tipo de cambio de 2,15 bolívares fuertes por dólar, igual que la tasa vigente en el marco del control cambiario.

El presidente de la Venamcham, Edward Jardine, estimó que en el repunte inflacionario incidirá "la reconversión monetaria y el redondeo al alza", fruto del cambio este año del bolívar al bolívar fuerte de la moneda venezolana, así como el aumento de la demanda que, a su juicio, no va acompañado de una inversión en los sectores productivos.

Pedro Palma, profesor de Economía del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA), destacó la "política expansiva" de gasto público del Gobierno y su dependencia del petróleo del Gobierno, además de que cuestionó las cifras de producción de crudo.

Los 3,2 millones de barriles que reporta la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) como producción diaria están "muy por debajo" de los niveles reales, aseguró.

También consideró que la política de control estatal de precios de un centenar de productos de consumo masivo está "totalmente distorsionada" y que la "altísima valoración" del bolívar implica un "subsidio importante" por parte del Gobierno, "desequilibrio" que "tarde o temprano" tendrá que enfrentar.

A su juicio, la inflación crecerá por el aumento del consumo ciudadano, el desabastecimiento, la escasez internacional de productos y los altos precios de estos, por lo que instó al Gobierno a "sincerarlos".

El ejecutivo de AC Nielsen de Venezuela, Joseph Saade, alertó a su vez de la búsqueda de empleo en el exterior y dijo que ello lo alienta la inseguridad personal, el desabastecimiento, la inflación, la gestión del Gobierno y la "percepción del Socialismo del siglo XXI", propugnado por el presidente venezolano, Hugo Chávez.

Saade opinó que Chávez emprende medidas "moderadoras" como la reciente flexibilización de precios, al mismo tiempo que tiende a la "radicalización", y puso como ejemplo el conflicto con su colega de Colombia, lvaro Uribe, por el proceso de mediación con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

En el mismo foro el director del diario Tal Cual, Teodoro Petkoff, afirmó que Chávez "tiene un lado del hemisferio cerebral girondino y otro jacobino, uno bolchevique y otro menchevique", en referencia a las tendencias políticas moderadas y radicales de la Revolución Francesa y de la Revolución Rusa.

El hecho de que el gobernante perdiera el referéndum con el que quiso reformar la Constitución el pasado mes de diciembre supuso, a su juicio, un "punto de inflexión" y el "deterioro del liderazgo de Chávez" ante el "pueblo venezolano"

1 comentario:

Unknown dijo...

La actual realidad venezolana nos ha pensar un poco en lo que ha pasado en el Ecuador, o lo que se podría pasar en nuestro país, dada la dependencia económica del petróleo.
El caso venezolano es crítico dado el desabastecimiento de productos básicos, tales como leche, harina de trigo y azúcar, mismos que se han dejado de producir internamente, dado el abandono estatal para el sector productivo, con el pensamiento de "tenemos petróleo y podemos importar".
Este pensamiento nos atrevemos a decir que hundirá a Venezuela, pues si bien es cierto el gobierno venezolano tiene una política expansiva del gasto de gobierno, no es menos cierto que la dependencia petrolera pone a la economia venezolana a pender de un hilo dado que la productividad interna no posee un motor que impulse ese desarrollo, provocando que haya menos producción, lo que lleva al desempleo y también a la escasez y encarecimiento de productos.
Talvez Chávez debería dejar de lado su interés particular de adueñarse de Venezuela y pensar un poco en el interés común que es el bienestar de sus compatriotas venezolanos.